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CARMEN POSADAS: EL SIGLO XXI ES YA EL SIGLO DE LAS MUJERES
06 Abril 2016
El pasado 8 de marzo se entregaron los Premios Internacionales de la Madrid Woman´s Week 2016 en la Embajada Italiana. Estos galardones reconocen a aquellas mujeres que sirven de inspiración para crecer, aprender y actuar. En definitiva, aquellas mujeres líderes que “abren camino” a las demás con su ejemplo.
Entre las premiadas se encuentra la escritora Carmen Posadas (Premio en la Cultura), la jugadora de Bádminton Carolina Marín, Nerea Torres (Mujer Emprendedora) y Ana Peláez (Mujer Solidaria).
“El siglo XXI es ya es el siglo de las mujeres” afirmaba Carmen Posadas. La que fuera ganadora del Premio Planeta en 1998 por ‘Pequeñas Infamias’ recordó el largo camino que la mujer ha recorrido y que aún le queda por recorrer. Posadas rememoró también la constante lucha que se ha mantenido en la historia para lograr la igualdad entre hombres y mujeres.
Con la celebración de los premios concluían las jornadas Madrid Woman’s Week de la Fundación Woman’s Week desarrolladas en el centro cultural Casa de Vacas de Madrid. La conclusión de las mismas ha sido unánime: el objetivo en los próximos años ha de ser lograr un liderazgo común sin distinciones entre hombres y mujeres.
“Cuando logremos dejar de hablar de liderazgo femenino y masculino y simplemente hablemos de liderazgo, independientemente del género, habremos alcanzado un logro histórico por el que hemos luchado”. Con estas palabras Montserrat Tarrés, presidenta general de FutureBrand, cerró la Jornada de Comunicación ‘El Dircom como gestor de valores: Igualdad y Felicidad de MWW 2016’.
Por su parte, Ana Peláez, delegada por el Gobierno de España en la fase final de los trabajos preparatorios de la Convención de la ONU sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad, destacaba el significado de la palabra solidaridad: “siempre he confiado en la solidaridad de la gente para salir adelante. En mi pueblo, cuando era pequeña buscaba lo que yo denominaba: rincones solidarios, que era dónde sabía que había personas que me ayudarían a cruzar la calle”.
por Eugenia Bravo